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Los que tenemos una vida partida en dos actos, uno analógico y otro digitalizado, podemos recordar que, hasta hace poco, lo que llevábamos con nosotros a todas partes eran las llaves y la cartera (y como extra, el tabaco o las gafas). Pero de unos años a esta parte, a los humanos nos ha salido un compañero omnipresente, el móvil, que primero competía por ser cada vez más pequeño y más duro y después creció para convertirse en una especie de puerta con pantalla táctil y a color que llevamos irremediablemente a todas partes. Porque al móvil, recordemos, al principio se le dejaba en casa o en el coche, relegado a su función original de llamador de emergencias. Pero hemos terminado metiéndolo en la cama como un amante de plástico y silicio.
Los estudios señalan que en nuestro país nos pasamos una media de dos horas al día frente al teléfono. Y nuestro compañero irremediable, del que creemos conocer todos sus secretos, tiene, como la gente de bien, vidas paralelas y excelencias ocultas. ¿Qué te habías creído? Aquí van algunas de ellas.
Tu móvil te escucha y puede hablarte
Ya tengas a Siri en iOs (el sistema operativo de los iPhone de Apple) o el asistente de Google, te resultará sorprendente que hay un ser digital que vive en tu teléfono. ¿Nunca has visto a algún loco gritándole a su teléfono “ok Google” o “dime, Siri”? No dejes de tener presente que dentro de tu teléfono hay un robot al que han puesto nombre que sabe todo de ti, te escucha y te habla. Más que respuestas inteligentes –de momento, estos asistentes son unos zotes monumentales–, lo que puedes esperar de tus robots es que apaguen las luces de la casa cuando se lo ordenes o que te digan qué tiempo va a hacer mañana. Facetas completamente prescindibles. La distopía de la sociedad futura de los libros de ciencia ficción debe ser esto mismo: humanos solitarios hablando con robots sirvientes…
También cuenta tus pasos
Como sociedad avanzada del primer mundo tenemos dos problemas básicos: sobrepeso y ansiedad. El mejor remedio de todos, una vez que se deje de ingerir comida basura, es caminar. Para eso, el fabricante de tu móvil ha instalado un podómetro que sabe cuánto caminas y cuántas calorías gastas cada día. En iOS viene por defecto con el artilugio, y en Android requiere descargar una app gratuita de podómetro. También sabe por dónde vas, pero eso no te lo dice a ti. Se lo dice a los rastreadores.
Es un detector de metales
Si tienes un teléfono con sistema Android seguramente tendrá dentro un magnetómetro, un sensor que detecta y mide los campos electromagnéticos. Si además te instalas la app Detector de metales, ya puedes utilizar tu móvil para un uso inesperado, como buscar monedas en la playa. Quién sabe si cerca de tu casa tienes un yacimiento romano y te despiertas con ganas de expoliarlo…
Llevas un escáner en el bolsillo
Los que hemos tenido un pasado analógico y como mucho usábamos eso llamado escáner, a veces no sabemos cómo digitalizar un documento cuando te lo pide alguien tan antiguo como Hacienda o el notario. Pues bien, con la cámara del teléfono y una app de escáner, que hay cien mil, ya tienes la oficina contigo.

Tu smartphone es una brújula
Si no eres muy observador del cielo y no sabes por dónde nace el sol, si te pierdes en un desierto o quieres saber la orientación del piso nuevo de Maripuri, necesitarás una brújula. Tu móvil Apple la lleva por defecto.
Y una plomada
También tiene un estabilizador vertical, para que cuelgues bien derechos todos los cuadros que quieras/puedas.
Siempre puede ser un router
¿Qué me dices? Y con las tarifas de datos de las operadoras, cada vez más generosas en un país adicto a Netflix, esa cosa del tethering o “compartir internet desde el móvil” puede ser tu solución cundo te vas a esa casa del pueblo donde nunca has puesto ADSL.
Y un estudio de grabación
La expansión de la tecnología es una mezcla de esclavismo y democracia. Para un músico, hay bendiciones múltiples como la de poder grabar sus propios discos de manera autosuficiente. También desde el teléfono, con un pequeño hardware, apps como Garageband en iOs transforman el móvil en un estudio de grabación con pistas múltiples, instrumentos digitales y efectos de sonido. Artistas como Kendrick Lamar han grabado canciones enteras de sus discos en el teléfono.
Lleva una cámara de fotos profesional
La falta de luz suele ser el enemigo de las fotos de los teléfonos, tan dignas ellas. Con funciones como la cámara profesional en Android, ayudados de un pequeño trípode, podremos controlar el tiempo de exposición y la apertura de diafragma y decirle «hasta luego» a las pesadas cámaras de verdad.
Información de emergencia
Y si algo nos pasa –que nos pasará–, nuestro smartphone puede ser un aliado útil y mostrarle a un desconocido información de emergencia para médicos y enfermeros ante un posible accidente. Basta con indicarle al móvil nuestro grupo sanguíneo, posibles alergias o si se toma medicación.