Índice
Cómo cambiar bañera por plato de ducha no es difícil y tiene múltiples ventajas, como una mayor comodidad de acceso, mejor aprovechamiento del espacio del baño y un ahorro de un 35% de agua en cada uso.
Muchas personas no terminan de decidirse porque no saben cómo cambiar una bañera por un plato de ducha sin que la estética del baño se vea resentida, pero ahora existen fórmulas que permiten hacerlo sin grandes obras y sin necesidad de cambiar todos los azulejos del baño.
Cómo debemos cambiar la bañera por un plato de ducha paso a paso
Cada vez más personas deciden poner una ducha donde antes había una bañera porque desean renovar el cuarto de baño y mejorar su funcionalidad. Es, además, la mejor opción para personas mayores o con falta de movilidad, ya que les resulta más cómodo y seguro para evitar caídas.
¿Qué precio tiene el cambio de bañera por ducha?
Si ya estás pensando cómo plantear una reforma integral en vivienda, a la hora de cambiar bañera por ducha, el precio dependerá de varios factores, como la elección del material, las piezas que se deseen cambiar y su calidad. También puede variar en función de si lo hacemos nosotros o contratamos a un profesional especializado.
Suponiendo que nos decantemos por materiales de calidad intermedia y consideremos la opción de contratar a una empresa especializada en este tipo de trabajos, cambiar bañera por plato de ducha puede costarnos entre 700 y 2.500 euros, dependiendo de la región en la que nos encontremos y la empresa que contratemos.
Si no tienes un seguro de hogar completo, una vez te decidas a cambiar bañera por plato de ducha deberías contratarlo, ya que tiene la ventaja de ofrecer una cobertura integral, lo que incluye daños por agua, roturas o recomposición estética, entre otros aspectos.
Si te está planteando cómo cambiar bañera por plato de ducha paso a paso, esto es lo que debes hacer:
- Decidir las medidas del plato de ducha, para ver si optas a una medida estándar o un corte a medida.
- Retirar la bañera, una vez has cortado el paso del agua. Para ello hay que desprender el cemento o las juntas de silicona.
- Quitar los alicatados: será necesario eliminar algunos azulejos laterales o frontales, en función de la posición que ocupe la bañera.
- Adaptar la grifería: lo normal es que la grifería de la bañera y de la ducha no esté a la misma altura, por lo que será necesario cambiar los grifos de posición y seguramente elevarlos ligeramente, incluso desplazándolos hacia un lateral.
- Instalación del plato de ducha: tras verificar la conexión entre la válvula de desagüe y la tubería de evacuación para evitar filtraciones, procederemos a la nivelación del suelo y a la instalación del nuevo plato de ducha mediante un adhesivo especial.
- Completar los azulejos: la franja que ha quedado al descubierto se tiene que completar con un nuevo material, que puede ser un alicatado de un color diferente para hacer contraste o de una pintura especial para zonas húmedas.
Cómo cambiamos la bañera por plato de ducha sin obras
Cómo cambiar bañera por plato de ducha sin obras es relativamente sencillo hoy en día, ya que no exige trabajar en todo el cuarto de baño ni tirar tabiques. Aunque dependerá de la complejidad del proyecto, se puede hacer incluso en el mismo día, siempre que no existan daños ocultos, no haya que reemplazar la fontanería o el estado del baño no aconseje realizar trabajos de albañilería.
En cualquier caso, hay que tener en cuenta que en los dos días siguientes no se podrá utilizar la ducha, ya que es el tiempo necesario para su secado.
Cómo cambiamos la bañera por ducha sin quitar azulejos
La mejor opción si te estás planteando cambiar bañera por ducha sin quitar azulejos es contratar a un profesional, que estará acostumbrado a hacer este tipo de trabajos. En algunos casos se pueden salvar azulejos del frontal de la bañera para ser utilizados posteriormente. En otros casos, los clientes conservan azulejos del cuarto de baño que pueden utilizar.
En la parte que queda sin azulejos tras la obra se puede utilizar un material muy similar al que existía o bien otro que haga un juego de contraste, lo que le dará al baño un aspecto moderno y funcional.
